El pickleball es un deporte que comenzó a jugarse en los Estados Unidos en los años ’60. Pero que en la última década creció mucho, se puso de moda. El Yacht es el primer barrio de Nordelta en tener canchas para practicarlo.
Es un deporte de paleta que combina elementos del tenis, el pádel, el bádminton y el ping pong. Es muy fácil de aprender, de ritmo rápido y muy divertido de jugar debido a los largos peloteos que se producen en los partidos.
“Vecinos que viajan con frecuencia a Estados Unidos lo habían jugado allá, y les llamó la atención lo divertido y sencillo que es, por lo que plantearon la inquietud de hacer una cancha en el barrio”, dicen en la comisión de deportes del Yacht.
El barrio ya tiene dos canchas de pádel y aprobaron la construcción de una tercera. También cuentan con 4 canchas de tenis. Ahora sumaron dos de pickleball, que armaron en el playón polideportivo, que es de uso compartido: puede utilizarse tanto para el nuevo deporte como para otras actividades, ya que la red es móvil y se puede correr.
“En el barrio hay muchas familias jóvenes con chicos, lo que dio origen a esta Comisión de Deportes. -explican los vecinos-. Apuntamos a generar más actividades, pero por sobre todo, a lograr mayor interacción entre la gente, un movimiento más social, que los propietarios se conozcan e interactúen más”.
Similitudes y diferencias
El pickleball tiene similitudes con el pádel, pero, según quienes lo han jugado, las reglas son más sencillas, lo que hace que sea apto para mayor cantidad de gente. Mientras la cancha de pádel es cerrada con paredes, lo que genera rebotes y más variedad de golpes, la de pickleball es abierta. En lo que hace a la red, la de pádel es más similar a la del tenis, en tanto que la de pickeball es más baja, parecida a la de bádminton.
Sin embargo, la diferencia más marcada está en la pelota, mientras las de pádel y tenis son de goma con aire en su interior, la de pickeball es de plástico perforado, ligera.
Para impulsar el nuevo deporte, en el Yacht contrataron un profesor que dio clases abiertas para los vecinos, lo que generó mucha participación y momentos muy divertidos, según cuentan los que fueron parte de la convocatoria.
“Si el deporte prende entre los vecinos, ya tenemos pensado construir más canchas”, señalan en el barrio. El pickleball “perdona más los errores” y permite que jueguen personas de diferentes aptitudes y edades, lo que lo hace especial para, por ejemplo, partidos entre padres e hijos.
En el país ya existe una Asociación Argentina de Pickleball y unas 100 canchas para practicar el nuevo deporte. Ahora también hay en Nordelta.
Una Ciudad con más deporte, es una Ciudad más sustentable.