El 17 de mayo de cada año, en todo el mundo se conmemora el Día Internacional del Reciclaje, una iniciativa que busca crear conciencia sobre la importancia de reducir, reutilizar y reciclar los materiales para preservar nuestros recursos naturales y mitigar los impactos negativos en el medio ambiente.
En Nordelta, esta fecha cobra especial relevancia, porque estas estrategias están arraigadas en los valores de la comunidad y las buenas prácticas multiplican impactos positivos derivados. Con más de 45 mil habitantes y aproximadamente otras 20 mil personas que ingresan a diario a trabajar y visitar, en lo que va del 2023 se han logrado reciclar más de 209 toneladas de materiales, con 47% de los vecinos que participan del programa.
En nuestras redes sociales podés encontrar un nuevo video sobre estos impactos positivos de la separación de residuos. Es parte de la campaña #NordeltaSustentable que podés ver completa en @avnordelta en Instagram, Facebook y YouTube.
Líneas de separación
Como parte de su sistema integral de gestión de residuos, la Ciudad tiene implementado un importante circuito de recolección selectiva que contempla múltiples líneas de separación.
Por un lado, están los residuos húmedos, es decir todos aquellos materiales no reciclables que son recolectados y derivados a rellenos sanitarios.
Por el otro, casi la totalidad de los vecinos de la Ciudad disponen de la opción de separar reciclables y disponerlos en una bolsa verde junto al pilar de su casa o en su edificio: papel, cartón, plástico, vidrio y algunos metales. Ese circuito diferenciado se retira los lunes, miércoles y viernes por la mañana.
A su vez, en Nordelta también se separa Aceite de Cocina Usado (ACU), que los vecinos pueden disponer en el contenedor de las oficinas de AVN o en la guardia de los barrios participantes del programa.
Adicionalmente, hace poco se sumó una nueva línea de separación de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos, también conocidos como RAEEs. Por ahora el programa está en etapa de prueba y cuenta con un único contenedor en el estacionamiento de las oficinas de AVN. Todos los vecinos pueden llevar sus pequeños electrodomésticos y accesorios para disponerlos.
Por último, la Ciudad también realiza una separación y posterior reciclaje de los residuos verdes de poda y jardinería, derivados lógicamente del mantenimiento de los espacios verdes.
Impactos positivos
Desde luego cada kilo de material que se separa representa un kilo que se evita que llegue a los rellenos sanitarios, lo que contribuye a evitar su saturación y que así funcionen mejor. Sin embargo, los beneficios de esta separación son muchos más: reaprovechamiento de recursos, economía circular y generación de empleo.
Los residuos verdes, por ejemplo, son enviados a una planta chipeadora que los transforma en material que se reutiliza como chips para los canteros y plazas de descanso de la Ciudad.
El Aceite de Cocina Usado, por su parte, es recolectado por la empresa RBA Ambiental y es procesado para la producción de biodiesel.
Los RAEEs, en tanto, son retirados por la empresa Buenos Metales que realiza el desmantelamiento de los electrónicos y el procesamiento de los diferentes componentes (como plásticos, metales y plaquetas de circuitos impresos) para su posterior venta como materia prima de diferentes industrias.
Los reciclables (papel, cartón, plástico, vidrio y metales), por último, son retirados por la Cooperativa Creando Conciencia, que realiza una segunda clasificación y procesamiento de cada tipo de material para reaprovecharlo y venderlo como materia prima de nuevas industrias. Por si fuera poco, la Cooperativa es la fuente de empleo de 82 familias.
Una Ciudad que separa y recicla, es una Ciudad sustentable.