Los carpinchos, como toda la fauna nativa, se encuentran protegidos por el Decreto de Ley 10081/83. Es por ello que cualquier acción directa que se realice sobre ellos debe estar avalada por la autoridad de aplicación, en este caso la Dirección de Flora y Fauna de la Provincia de Buenos Aires.
AVN realiza estudios anuales de población de carpinchos desde el año 2015, los cuales son presentados regularmente a dicha Dirección.
A través de estas mediciones sistemáticas de actividad de los animales en las costas, en 2019 se comenzaron a notar los primeros signos de aumento de la población de carpinchos.
Ese año se solicitó a la Dirección Provincial de Flora y Fauna la aplicación de medidas para administrar el fenómeno. Hubo permanentes presentaciones al organismo, tanto sobre el crecimiento de la población animal, como sobre su situación sanitaria y la mortalidad de la misma, también sobre accidentes y respecto a mascotas heridas y muertas.
Más carpinchos
El crecimiento de la población de carpinchos en Nordelta se explica por las más de 500 hectáreas de lagos y espacios verde disponibles, donde no hay depredadores ni cazadores furtivos, como sí los hay en los espacios abiertos. Esa podría ser la razón por la que no hay un crecimiento similar de la población de estos animales en áreas cercanas a Nordelta.
A finales del 2020, y favorecida por la pandemia, la población de carpinchos mostró un incremento aún más acelerado. En un primer momento se buscó paliar la situación estableciendo zonas buffer con plantaciones de vegetación aptas para refugio y alimento de los carpinchos, pero las mismas fueron insuficientes ante el crecimiento de la población.
Por ese motivo, se modificó la política de corte de pasto y vegetación acuática, buscando generar más espacio para los animales. Se apuntó a que permanezcan en los lagos y costas, sin circular por los espacios públicos, lo que genera riesgos de accidentes o incidentes con mascotas, que también pueden afectar a personas.
Propuestas presentadas
Las inspecciones de la autoridad provincial a Nordelta constataron desde 2020 la sobrepoblación de carpinchos, pero no definieron medidas de control de la misma, sino recomendaciones sobre campañas de comunicación y concientización.
Ya en 2020 AVN comenzó a analizar metodologías de control de crecimiento de la población de carpinchos. Se avanzó en la colaboración con investigadores científicos del Conicet y la UBA especializados en la especie, y se hicieron las primeras propuestas técnicas a la Dirección de Flora y Fauna.
Entre los trabajos analizados y presentados a la autoridad, estuvieron los realizados por universidades de Brasil con esterilización de machos dominantes como metodología de control de crecimiento de la población de carpinchos. Allí lo realizan para prevenir la expansión de enfermedades que afectan al ser humano.
En 2021 AVN presentó un proyecto de trabajo sobre control del crecimiento de la población animal, que no fue aprobado.
La iniciativa del Conicet y la UBA
En 2022, investigadores del CONICET y la UBA presentaron a la Dirección de Flora y Fauna la propuesta de realizar desde esas instituciones un estudio de factibilidad de la vasectomía como posible medida de manejo de la especie, al cual AVN prestaría su apoyo.
Este proyecto fue aprobado por la CICUAL (Comité Interno para el Cuidado y Uso de los Animales de Laboratorio), requisito excluyente para que la Dirección de Flora y Fauna pueda aprobar su desarrollo.
Recién en mayo de 2024, la Dirección de Flora y Fauna aprobó una primera fase del trabajo, el seguimiento y control de individuos seleccionados.
Esta primera etapa permitirá además realizar a los animales análisis de sangre para poder tener mayor información sobre su estado sanitario. Serían complementarios a los estudios de heces que se hacen desde 2015, para descartar la presencia de parásitos y enfermedades.
Animales atropellados
Los carpinchos son roedores, y como todas las especies dentro de este grupo, se reproducen velozmente. Cada hembra puede tener 2 o 3 pariciones anuales, con hasta 8 crías en cada una. Así, la población de carpinchos no ha parado de crecer, cada vez más aceleradamente desde 2021. Esto ocasiona cada vez más dificultades en la convivencia con las personas y riesgo para los propios animales.
Uno de los problemas más presentes son los accidentes de tránsito, con atropellamiento de animales por parte de autos, motos y bicicletas. Esto genera carpinchos y personas heridas, además de daños materiales. Y, en muchos casos, animales muertos.
Para mitigar en algo las consecuencias, desde 2021 se comenzó a instalar cartelería en los sitios donde es más frecuente el cruce de animales sobre la calle. La misma se renueva periódicamente. También se trabaja en forma constante en una campaña de concientización sobre el tema entre los vecinos.
En 2023, por otro lado, se estableció un sistema de guardias veterinarias que atiende a los animales heridos, incluso durante la noche.
Mascotas y personas
Otro problema generado por el crecimiento de la población de carpinchos es el enfrentamiento con mascotas, especialmente perros, que muchas veces resulta con animales heridos e incluso muertos.
Se hicieron campañas de recomendación a los vecinos para que siempre circulen -tal como lo indican los reglamentos- con sus mascotas sujetas con correa. Pero igualmente se han registrado casos de carpinchos que han reaccionado agresivamente frente a perros, afectando en algunos casos también a personas. Ha sucedido tanto en jardines privados como en espacios públicos y calles.
El crecimiento acelerado de la población de carpinchos también provoca efectos adversos y peligros para ellos mismos. Como, por ejemplo, el aumento de la competencia por alimento, territorio y reproducción, lo que genera también animales heridos o mal alimentados, así como aumento de posibles enfermedades de la especie.
En ese contexto, desde la Asociación Vecinal Nordelta seguimos trabajando por una convivencia pacífica entre las personas y la fauna local, siempre dentro del marco de la ley y de las autorizaciones de la Dirección de Flora y Fauna provincial.
