En Nordelta hay más de 4.800 luminarias de alumbrado público. Un grupo de 10 personas se ocupa de su mantenimiento, los 7 días de la semana, las 24 horas.
En las avenidas Troncales hay 1.500 luminarias, y el resto se reparten en los barrios. El mantenimiento de toda esa infraestructura está a cargo la gerencia de Operaciones de AVN.
La tarea se reparte entre tres grupos, formados por un total de 10 personas. Hay 2 patrullas diurnas, que comienzan su tarea a las 9 de la mañana y se ocupan de los trabajos programados con antelación. Y luego están las recién implementadas “cuadrillas nocturnas”, que responden a las emergencias.
La primera “cuadrilla nocturna” comienza su trabajo temprano, a las 14, y van hasta las 22 horas, para abarcar todo el período de encendido de la red de alumbrado público, cuando se detecta la mayor parte de las fallas. Supervisan el funcionamiento de las luminarias, y, sobre todo, responden a los llamados de la Central de Monitoreo, que alerta cuando hay sectores de iluminación apagados, ya sea porque la registran en forma directa o porque reciben un llamado de un intendente de barrio.
La segunda “cuadrilla nocturna” opera en forma de guardia pasiva. Comienzan su tarea a las 22 y están disponibles hasta las 6 del día siguiente. Ellos se activan cuando hay un llamado por 10 luminarias o más apagadas en una misma calle.
En total, las 10 personas que trabajan en el equipo terminan haciendo entre 5 y 10 reparaciones diarias en promedio. Algunas son una sola lámpara que se resuelve en minutos. Otras de mayor dificultad, con gran cantidad de luminarias que pueden demandar varios días.
En las avenidas Troncales, el 80% de las luminarias ya fue reemplazada por leds. El equipo de Operaciones destaca que el mantenimiento de estas lámparas es mínimo, que sólo requieren reparación por algún siniestro sobre la avenida, por ejemplo, choque de columnas, o lo más habitual son hormigueros y fallas en el tendido de los alimentadores. Pero que no tienen prácticamente fallas las luminarias.
Además de estos tres equipos de trabajo con las luminarias hay un cuarto enfoque: también este año se implementó un sistema de relevamiento semanal de todas las luminarias de alumbrado público, donde se genera un reporte por cada una que no está funcionando; y se puso un plazo máximo de 7 días para su reparación, por lo cual debe estar solucionado el problema a la siguiente revisión (con excepción de inconvenientes de mayor envergadura).
Una Ciudad mejor iluminada es una Ciudad más segura.
