El inconfundible paisaje de Bahía Grande tiene ya nuevos pórticos de acceso a los peines de amarre. Si bien aún no están operativos, estos portales de moderno y elegante diseño, se encuentran en una etapa muy avanzada. Sólo resta la instalación eléctrica para su iluminación y las tecnologías de acceso y seguridad. Además de la mejora para los propietarios de los barcos, será una forma de embellecer más la bahía nordelteña.
Las amarras de barcos de Bahía Grande tienen cuatro accesos, el Peine Central, la Capitanía, Miradores y Peine sur. Estas nuevas estructuras de diseño reemplazan los viejos portones con rejas. Realizadas en metal y madera, con puertas de vidrio de apertura automática, control electrónico de seguridad e iluminación, estos nuevos pórticos ofrecen mejores prestaciones para los amarristas.
El diseño de los pórticos estuvo a cargo del estudio del reconocido diseñador industrial Juan Doberti, que fue seleccionado luego de una compulsa entre distintos profesionales. En el proyecto trabajaron tanto el director de amarras, Alfredo Morcillo Rosso, como el arquitecto Cristian Ramallo, parte del equipo técnico de AVN y Nordelta. Y es solventado por los dueños de las amarras de la Bahía.
“El diseño de los pórticos se centra en los muelles con la intención de ofrecer todas las plataformas despejadas y visualmente limpias -señalaron los diseñadores-. Se trata de un diseño singular que presenta una imagen identitaria para las Marinas Bahía Grande, les adjudica una impronta exclusiva de valor con una caracterización contemporánea propia. Se trata de un ámbito envolvente con carácter náutico, de arraigo en la tradición de los muelles entablonados del Delta”.
En Bahía Grande hay 111 amarras para barcos. Con la nueva obra, los amarristas ganarán en confort y en seguridad. Pero también se agregará valor al paisaje de la bahía.
